La institución finaliza el cuarto año del programa Respiro Rural
Trece niños discapacitados han disfrutado de un plan de ocio de la Fundación San Cebrián
El programa de la Fundación San Cebrián que lleva el nombre de Respiro Rural se clausuró ayer en las instalaciones que la propia fundación tiene en la localidad palentina de San Cebrián de Campos. Los niños que han participado en las actividades del programa, un total de 13 con discapacidad, dieron ayer el adiós final a un programa que comenzó el 5 de julio. Se trata del cuarto año de su puesta en marcha y se busca que los participantes se diviertan y que sus familiares puedan descansar, a su vez, durante esos días.
Para despedir el curso, los niños recibieron la visita del delegado territorial de la Junta, José María Hernández; del gerente territorial de Servicios Sociales, Alfonso Polanco; del director gerente de la Fundación, Fidel Ramos, y del presidente de la Fundación, Julio Rubio. También acudieron algunos padres de los niños y los profesionales que han impartido el curso.
La Fundación promueve esta iniciativa ante la escasez de recursos de ocio y tiempo libre para la comunidad de Castilla y León y por la demanda propuesta por los familiares de la Asociación de Personas con Discapacidad del Mundo Rural.
De los 13 niños, ayer se encontraban tan solo 9. «En esta última jornada, los pequeños disfrutaron de un día de piscina al aire libre, que marca un buen final al programa de verano», explicó ayer el director gerente de la Fundación San Cebrián, Fidel Ramos.
Por su parte, el director, el presidente y el equipo de profesionales mostraron un vídeo de cinco minutos de duración a José María Hernández y a todos los presentes en los que se explican las labores que los niños han realizado durante los dos meses del programa. Después, disfrutaron de un refrigerio al aire libre que hizo las delicias de los presentes. Algunas de las actividades que los pequeños han realizado durante el programa, en los diferentes talleres del programa de la Fundación, versan sobre ocio en la piscina, manualidades, relajación, aseo personal y excursiones a Husillos, Paredes de Nava y Carrión.
El programa no solo tiene como principal finalidad el ocio. Entre los objetivos también figura alcanzar un clima distendido y agradable de relación con los diversos grupos de población y el desarrollo de actitudes relajantes y un mejor conocimiento personal. Los niños han estado atendidos en todo momento por los profesionales de la Fundación. Los participantes proceden de distintos centros de la provincia, como Renedo de la Vega, Villalobón, Villamuriel, San Cebrián de Campos y Palencia.
Según la Fundación San Cebrián, este tiempo de trabajo se cierra con un balance muy positivo, tanto para los niños como para los profesionales que han participado en el programa. La cantidad y variedad de alternativas que se han puesto en marcha han supuesto un rotundo éxito.
Asimismo, la valoración de los padres sobre el programa también resulta muy positiva en cuanto a los objetivos. «El cuarto año se cierra una vez más con un balance positivo, así que seguramente nos encaminamos a preparar la del próximo año», recalcó finalmente el director de la Fundación.
