18.900 pasos de solidaridad


La Fundación San Cebrián celebró ayer la cuarta edición de su Marcha Jacobea que recorrió el tramo del Canal de Castilla comprendido entre la capital palentina y la localidad de Villaumbrales, con el atleta Mariano Haro como padrino. A las 9,30 de la mañana, muy puntuales, unos 1.200 andarines se dieron cita en el Parque de las Huertas del Obispo para comenzar esta caminata de 14 kilómetros cuyo objetivo era recaudar fondos para las distintas actividades de la Fundación, a la vez que pasar una jornada de convivencia. Por ello, cada participante había donado tres euros en concepto de inscripción.
Usuarios de la Fundación, amigos, familiares, trabajadores y todos aquellos andarines que se quisieron sumar a esta iniciativa partieron juntos del parque capitalino, a donde llegaron los autobuses que a primera hora de la mañana habían partido desde Carrión de los Condes, San Cebrián de Campos y Frómista. También recibieron el apoyo de las autoridades locales y provinciales, puesto que en el punto de salida estuvieron presentes el diputado de Servicios Sociales, Jesús Tapia; el delegado de la Junta de Castilla y León en Palencia; el presidente de la Diputación y el alcalde de Palencia. 

A buen ritmo, algunos con bastones y la mochila a la espalda, el grupo comenzó a estirarse y sobre las 12 horas, los asistentes llegaron a Grijota, tras 8,2 kilómetros de recorrido, donde pudieron hacer una pausa, refrescarse y tomar algo para continuar la marcha.

Así, por la orilla del Canal de Castilla, donde tuvieron que esquivar numerosos charcos, se pudo ver a andarinas acostumbradas a las caminatas, familias completas, parejas, grupos de amigos e incluso mascotas participaron. Algunos charlaban animadamente e incluso almorzaban a la vez que caminaban. Hasta una embarazada a punto de salir de cuentas se sumó durante un tramo de esta iniciativa, aportando la nota curiosa de la jornada.

Los caminantes estuvieron acompañados en buena parte del recorrido por una docena de caballos cuyos jinetes quisieron formar parte de la iniciativa llegando hasta Villaumbrales. También voluntarios de Cruz Roja y de Protección Civil realizaron la marcha a pie y en varios vehículos, para prestar asistencia a todos los que lo necesitaran, e incluso un grupo de moteros colaboró con la organización para garantizar la seguridad de los participantes en los cruces y núcleos urbanos.
visita turística. Así, con bastante adelanto sobre la hora prevista, la marcha llegó a Villaumbrales, donde estaba prevista celebrar una comida de hermandad aprovechando el buen tiempo reinante durante toda la jornada. 
Además, hubo tiempo de compartir experiencias y visitar la localidad ya que los asistentes podían acceder al Museo del Canal de Castilla y dar un paseo en el barco Juan de Homar. Además, desde la Fundación San Cebrián quisieron rendir un cariñoso homenaje al dulzainero recientemente fallecido José María Silva. Y tras la comida y la sobremesa, muchos de los participantes regresaron a sus localidades de origen en los autobuses puestos a su disposición por la organización. 
Con esta marcha, la Fundación San Cebrián ha cumplido con el doble objetivo propuesto: reivindicar los derechos de las personas con discapacidad y conseguir el apoyo de la sociedad para obtener la normalización de la vida de los usuarios de sus centros. 
Pese a que la marcha ya se ha celebrado, todavía pueden hacerse aportaciones en la Fila Cero, en la cuenta de Caja España 2096 0332 16 3034356504