La plantilla del Quesos Cerrato Palencia abandonó su rutina diaria en la mañana de ayer para realizar un bello gesto solidario, la visita a la Fundación San Cebrián, donde posteriormente se firmó el convenio anual de colaboración, por el que el club morado entrega quince pases de la temporada para el disfrute de quince internos.
Jugadores, cuadro técnico y el propio presidente, Gonzalo Ibáñez, acudieron a las cuidadísimas instalaciones del Centro San Cebrián y conocieron de primera mano el extraordinario trabajo que allí se realiza con los 250 residentes con discapacidad intelectual. Visitaron las diferentes dependencias, compartieron ejercicios motrices con los internos, acudieron a los diversos Talleres, firmaron autógrafos y recibieron todo el cariño del mundo.
Tras ello, al Pabellón del Centro San Cebrián donde les esperaban los equipos masculino y femenino de baloncesto para medirse en un partidillo de entrenamiento. «Las enchufan todas», comentó en un momento de este particular entrenamiento Natxo Lezkano. Y es que el equipo dirigido por Juanma Amor y Ester Alonso se empleó a fondo, como si de un partido más de su liga se tratase. No todos los días se tiene la posibilidad de poner un tapón a Rejón u Otegui, o romper la siempre férrea defensa morada.
Tras el partidillo, la firma del convenio con la presencia, entre otros, del presidente de la Fundación, Juan Pérez, y el director general, Fidel Ramos.
natxo lezkano
«Estamos encantados de poderles hacer felices»
Natxo Lezkano, técnico morado, atendía a todas las explicaciones de los monitores y personal en torno al trabajo que se está realizando en el Centro San Cebrián con estas 250 personas con discapacidad intelectual. Lo que más le sorprendió fue el tremendo cariño que recibieron de ellos. «Son personas muy agradecidas, que te ofrecen todo su cariño. Estamos encantados de poder estar aquí y poderle hacer felices. Aquí se desarrolla un gran trabajo. Es la otra cara de la vida a la que no podemos dar la espalda y siempre tendrán todo nuestro apoyo. Ellos nos suelen ir a ver al Pabellón y nos animan en los partidos y qué menos que les devolvamos la visita».
